Si la actual reglamentación y normativa antidopaje se hubiera empleado durante los Juegos Olímpicos de Münich o de 1976 en Montreal , los records de las por entonces alemanas orientales ( Marita Koch) o los del cubano Juantorena muy posiblemente no hubieran sido homologados.
Los paises del ámbito socialista tenían programas de desarrollo atletico que implicaban el uso de esteroides anabolizantes y otras susrtancias ( véase a fondo blosg http://drlopezcorbalan.blogspot.com.es/ y de hormonas proteícas de bajo peso molecular de dificil o imposible detección). Los rçecords de las velocistas orientales permanecieronm varios años imbatidos por esa razón. Cuando cayó el Muro de la vergüenza, en Noviembre del 1989, los archivos de la STASI, ( Servicios de la Seguridad del Estado) mostraron todo este tipo de enjuagues, programas clandestinos del uno de diversos compuestos y un decidido esfurezo del "Estado" por retroalimentarse de éxitos deportivos para justificar sus ideas polñiticas.
Obviamente, ahora no vale la pena y no s epueden demostrar niguna de éstas observaciuone sporque no se tomó la precauciónd e extraer plasma y dejarlo congelado hasta encontrar técnicas más precisas para medir las nuevas moléculas.
Actualmente la AMA o Agencia Mundial Antidopaje, después del escándalode l THG o tetrahidro gestrinona se guardan durante 10 años las muestra de sangre y orina. Tal sucee ahora, que se están usando muestras de Atenas 2004 para comparar perfiles de atletas sobre los cuales hay dudas sobre su honestidad.