No es una gran noticia en si, pero tal vez la comparativa nos permita discutir a cerca de si el negocio prima sobre los principios del olimpismo.

Se viene discutiendo desde hace varias olimpiadas el tema de que si es o no negocio. Obviamente, las entradas no son precisamente baratas debido a que hay que amortizar el coste de infraestructuras o la seguridad, por poner dos ejemplos.

Por otra parte, y aunque no repercute directamente sobre el coste de los JJOO pero si sobre el tema del negocio, está la financiación estatal en forma de becas o de centros de alto rendimiento, o incluso el coste de las prendas y accesorios deportivos que ayudan a mejorar marcas. No es lo mismo competir con una bici de carbono que con una de hierro. No es lo mismo correr o nadar con una ropa que con otra. Tampoco es lo mismo poder o no costear dietas alimenticias y seguimientos médicos al minuto. Como tampoco es lo mismo la profesionalidad y poder vivir del deporte que practicarlo en tiempo libre.

Volviendo al tema, supongo que el coste final del gasto en la totalidad de eventos, van incluidas las facturas de los artistas y personalidades que acuden a las ceremonias ¿O lo hacen gratis?